Mucha polémica en el Oporto-Atlético de Madrid, que se calentó en la segunda mitad, especialmente tras el 0-1 de Griezmann. En apenas tres minutos, cada equipo sufrió una expulsión. En el minuto 67, Carrasco vio la roja directa por un golpe a un miembro del banquillo local. «La roja es muy excesiva. A este nivel eso no puede ser roja. Con amarilla vale», explicó Iturralde, árbitro de AS y la SER, en Carrusel.

«No hay nada y no es como la del camiseta Inter, que le tira el puño«, agregó Dani Garrido, director del programa. En primera instancia pareció un golpe más duro, pero fue más un agarrón alrededor del cuello. «Eso no es agresión, con amarilla vale», acordó Relaño.

Pero tres minutos después las quejas cambiaron de bando. En un ataque rojiblanco, Cunha cayó cerca del banquillo y Wendell le golpeó en el cuello al forcejear por sacar de banda. «Nada, tampoco es jugada de roja», explicó Iturralde. Y Talavera censuró la actitud del conjunto local: «Son unos macarras los del Oporto».

Iturralde González, no obstante, había advertido que Clement Turpin no estaba a la altura de un partido de esta exigencia. «Este árbitro es nefasto y si lo sé yo, lo tiene que saber quien lo pone».

En el tiempo añadido, Turpin pitó penalti de Hermoso y, según iturralde, el árbitro se volvió a equivocar.